El robot permanentemente se escucha a sí mismo durante la reproducción de sus propias frases, dando lugar a ruido y detección de palabras o frases que no deberían ser recogidas en ese momento por el reconocedor de voz. Esto hace que entre en bucle o en estados, dentro de la máquina de estados, a los cuales no debería de entrar.
El robot permanentemente se escucha a sí mismo durante la reproducción de sus propias frases, dando lugar a ruido y detección de palabras o frases que no deberían ser recogidas en ese momento por el reconocedor de voz. Esto hace que entre en bucle o en estados, dentro de la máquina de estados, a los cuales no debería de entrar.